Todo el mundo tiene momentos vergonzosos en el trabajo, eso demuestra que todos somos humanos. La mejor manera de manejar los momentos incómodos es seguir adelante con elegancia y, si es posible, intentar encontrarle el humor a la situación.
Diane Domeyer
Respire hondo. Si la metedura de pata le provoca pánico y preocupación, intente ralentizar su ritmo cardíaco respirando hondo.
Trátese a sí mismo con gracia y compasión. Recuerde que todo el mundo comete errores embarazosos y que las cosas podrían haber sido mucho peores. Tenga en cuenta también que tendemos a imaginar estos momentos desafortunados como mucho más grandes de lo que son en realidad.
Asuma la situación o el error. No huya de él. Si necesita disculparse, corregirse o arreglar algo después de un momento embarazoso, hágalo para poder seguir adelante.
Acepte la frivolidad. Algunos de nuestros momentos más embarazosos son, en realidad, graciosos y cercanos, si estamos dispuestos a verlos de ese modo. Todos los entornos de trabajo necesitan más diversión. Dele tiempo y, cuando le parezca oportuno, no tenga miedo de reírse de sí mismo.
Fuente: Adaptado del artículo: “How to Move Past an Embarrassing Moment at Work” (Cómo superar un momento embarazoso en el trabajo) por Lan Nguyen Chaplin. Traducción y edición del “Tip Gerencial Del Día”: José Armando Aguilera Ruiz.
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